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La edad media de los vehí­culos destinados al transporte por carretera de nuestro paí­s es de casi 10 años.

Concretamente actualmente los vehí­culos destinados al transporte de viajeros tienen una antigí¼edad de 9,6 años mientras que la edad media de los vehí­culos destinados al transporte de mercancí­as es aún mayor y se sitúa en los 10,06 años.

La edad media tan elevada de los vehí­culos destinados al transporte por carretera suponen un peligro para la seguridad vial, y según ha indicado Juan Antonio Sánchez Torres, presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehí­culos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), «Un coche de 15 años, en la carretera y sin revisar es un verdadero peligro».

Si unimos la edad elevada de los vehí­culos al menor gasto en su mantenimiento como consecuencia de la crisis las probabilidades de sufrir un accidente aumentan considerablemente.

Quizá estos sean los motivos que hace que se haya producido un aumento de la accidentabilidad entre los profesionales del transporte de mercancí­as por carretera, que conducen camiones de más de 3.500 kilos, aunque estos mayores í­ndices de accidentabilidad también pueden estar provocado por no respetar los tiempos de descanso, otra de las consecuencias de la crisis.